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La Caída y el Rescate del Amor Novela

Capítulo 1949
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Capitulo 1949 A que aportaria vs papel en vaku? Sharga realmente era muy sensile a todo lo relacionado con Octavio.

La letra en ese papel bajo sus pies le era especialmente familiar.

A ni siquiera sabia por que habia muchas personas en su clase que ni siquiera podia recordar, pero hubo algo en Pax pocas tetras que te dejo una impresion tan profunda.

Alivia también el papel flotando junto a sus pies y su expresién camdrasticamente, empujé a la sirvienta y como para recogerlo, pero Alicia se te adelanto y lo agarro primero.

Sin darse por vencida, Alicia examino cuidadosamente las letras en la hoja.

Damel La voz de Miela sono algo aguda y mientras gritaba, extendié la mano intentando arrebatar el papel de las manos de Alcia Ella esquivo su mano.

Levanto ligeramente la hoja de papel y observé con indiferencia a Mirela, claramente nerviosa, mientras recordaba la voz impaciente de Octaal teléfono.

No tenia tiempo? De repente, ella solté una risa.

Su rostro, que hasta hace poco no mostraba ninguna emocién, se ilumind con esa sonrisa.

Ese brillo era como una flor tiema lista para florecer en pyimavera: pero atrapada en un grueso hielo.

La atmosfera que se enfriaba alrededor hizo que todo el salén se volviera mas sombrio.

Todos estaban acostumbrados al orgullo y al temperamento que se esperaba de Alicia siendo la nifia consentida de la casa, asi que nadie dijo una palabra.

Aunque sabian que los sentimientos a esa edad eran trivialidades infantiles.

“Damelo!” Mireia solo pensaba en esa hoja de respuestas y extendi6 la palma hacia Alicia, llenandose de ira.

Alicia tenia una sonrisa ligera en sus ojos y lentamente Ilevé el objeto en sus manos ante ambas.

“Al princitenia mis dudas, con esa actitud tuya de mirar por encima del hombro a todos, como si el mundo te debiera un millon de ddlares, ;quién serfa tan tonto como para invitarte a estudiar? Después pensé que, bueno, en este mundo de millones, unos cuantos tontos son de esperar, pero nunca imaginé que ese tonto seria Octavio.” Mireia se quedo atdnita, estaba acostumbrada a los sarcasmos de Alicia, pero no esperaba que también incluyera a Octaen sus insultos.

Ella habia estado conteniéndose, acumulando demasiado en su interior, y si no fuera por la presencia de su tio, probablemente ya estaria enfrentandose a Alicia.

Habia cosas que podia soportar, pero no permitiria que menospreciara a Tavito por su culpa.

“Alicia, jya basta! Vivi con Tavito durante mucho tiempo, incluso si eres la princesa indomable de la familia, ;qué importancia tienes frente a él o para mi? Quién te gusta es asunto tuyo, y a quién le gustan los demas es asunto de cada quien. No todo lo que deseas tiene que ser tuyo! Al menos, si quieres estar con Tavito, primero debes preguntarle si él quiere estar contigo.

(No te resulta patético usar tu amor unilateral para mandar y dominar?” Alicia escuché pacientemente hasta que Mireia termind, sus palabras eran hirientes, los sirvientes ni se atrevian a respirar, incluso Lisandro miraba a Mireia con un deje de desaprobacién en sus ojos.

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1/5 09:34 ¢Qué era una sobrina, después de todo? Su hija, criada y mimada con tanto cuidado, debia ser tratada como un tesoro ante cualquiera.

“iAlguna vez dije que te mantuvieras alejada de éI?” La cara de Alicia todavia llevaba una sonrisa sarcastica, hablando tranquilamente, su breve pregunta parecia no tener nada que ver con lo que Mireia acababa de decir.

La chica se detuvo.

Alicia dos pasos hacia ella, “Si le gusto o no es asunto suyo, jy quién eres tl para dalecciones? ;Por qué no te pegaste a él antes de que yo declarara mi derecho sobre éI? ;No veo que antes te gustara tanto, verdad?” “iCémo sabes que yo no...?” “;Lo hiciste?” Alicia la interrumpié suavemente, “;Qué tal es Octavio? Si realmente te gustara, ;crees que estarian juntos hoy?” Mireia quedd desconcertada por un momento, sin entender bien a qué se referia, “;Qué quieres decir?” “Ja.” Alicia solté una risita sarcastica, mirdndola con burla en sus ojos, “;Crees que él va a permitir que una chica que no tiene las intenciones claras esté revoloteando a su alrededor todo el tiempo sin sentir nada?” Mireia se cuenta y solté una carcajada, “Alicia, creo que no tienes idea de lo molesta que puedes llegar a ser.” Queria decir que Octarealmente estaba harto de Alicia.

Ella hizo girar sus ojos y recordé la voz de Octapor teléfono, lena de impaciencia, esbozé una sonrisa sarcastica y asintio: “Parece que en efecto, estoy empezando a caerle pesada.” Mireia solté un bufido cargado de ironfa, con una sonrisa burlona en su rostro.

Pero Alicia se queddé mirédndola con una sonrisa despreocupada, “Como dices, si él esta harto de mi, es porque sabe lo que siento por él. ;Y ta? ;Qué crees que significa la actitud tan indiferente que tiene contigo? ;Qué te quiere? Ja. Si asi es como demuestra su afecto, entonces pienso que, aparte de a mi, debe querer a todo el mundo.” La sonrisa de Mireia se congeld en sus labios.

Alicia levantd la almohada que tenia en el regazo y con una mano aparté su cabello recién lavado y secado detras de su oreja, revelando su rostro palido y hermoso bajo la luz, como cubierto por un halo etéreo.

“;Qué es lo que realmente quieres demostrar, Mireia? ; Quieres probar que eres mejor que yo a través de la eleccion de Octavio? ;Qué es lo que no te cuadra por dentro? ;Acaso la familia Valdivia te ha tratado de forma diferente a mi? ;Qué ganas con competir conmigo en secreto?” Lisandro fruncié levemente el cedesde un costado.

Mireia se sintié como si le hubieran clavado una aguja venenosa y respondié de inmediato, “; Qué estas diciendo? jEso es absurdo!” “iAbsurdo? ;Quién sabe? Preglntate a ti misma si estoy hablando sin sentido.” Mireia apretd sus labios con fuerza, “Alicia, noendilgues crimenes inventados para probar que tus sentimientos son puros y nobles. jNadie es tonto aqui! Y no seas tan confiada, pensando que a todos les gustas.” “iA quién le importa si alguien mas aparte de Octavioquiere?" replicé Alicia con indiferencia, aunque sus ojos. perezosos rapidamente se volvieron gélidos, “Si tl insistes en provocarme, Mireia, debo recordarte una vez mas que en toda la ciudad todos saben que soy la consentida de la familia Valdivia, nunca he sufrido ningtn desaire.

Puede que yo sea arrogante, caprichosa, sentimental y despreciativa, la familia Valdiviaha cuidado y mimado en todo sentido, pero nunca para quehumillen o maltraten.

Si yo sufro el mas minimo dafio, todos pagaran el premil veces. Asi que antes de hacer cualquier cosa queinvolucre, piensa bien si puedes soportar las consecuencias.” Sus palabras eran de una arrogancia extrema.

2/5 09-34 Mireia apreté sus manos con fuerza, temblando, y de repente arrebaté el papel que Alicia sostenfa.

Ella no insistié en retener el papel.

“iAsi que admites ser arrogante y prepotente? ;Crees que Octaestd loco o es tonto para enamorarse de alguien como td? encantaria ver cémo seras dentro de diez afos, si no terminas con él, qué cara pondras entonces!” Dicho eso, Mireia la miré fijamente con furia.

Alicia se quedd parada en su lugar unos segundos, le eché un vistazo a Lisandro y sin decir palabra, apreto los labios y caminé hasta el sofa, donde lanz6 la almohada.

Todos estaban algo confundidos, pero al momento siguiente vieron cémo se inclinaba para tomar el vaso de vidcon leche que estaba sobre la mesa de centro.

La sirvienta esbozé una mueca disimuladamente, apenas perceptible.

Era justo el momento perfecto, la temperatura de la leche era exactamente como a Alicia le gustaba.

Mireia observé cémo su prima, sin decir palabra, comenzaba a beber la leche, frunciendo el cecon preocupacion.

Como quien observa a un loco, la miré fijamente durante unos segundos, luego recogié el libro del suelo, agarré su mochila y tras decirle a Lisandro que subiria a descansar, subi6 las escaleras con paso firme.

Lisandro suspiré y fij6 su mirada en su hija.

Habia bebido la mitad de su vaso de leche y al ver que Lisandro se acercaba, hinché las mejillas levemente, como si estuviera molesta con él.

El sonri6 con resignacién.

“iDe verdad estas enojada conmigo?” Alicia, en efecto, tenfa mucho coraje acumulado, “;Acaso no puedo estar un poco molesta después de la regafiina?” Continué bebiendo.

“Ustedes son primas. No deberian estar siempre de malas o peleandose cuando se juntan. ;No piensan en lo que siento?” “Si noimportaran tus sentimientos, desde la primera palabra que ella dijo hoy, ya habria reaccionado.” La tactica de dar lastima de Lisandro no funciond, sino que incrementé su sentimiento de culpa.

Conociendo el caracter de su hija, no dudaba que pudiera llegar a los golpes.

Pensandolo bien, ella era considerada en su propia manera.

Alicia terminé de beber la leche poco a poco.

Dejé el vaso en la mesa de centro y dijo, “Buenas noches.” “Alicia.” “¢Acaso voy a guardar rencor por una noche? Buenas noches.” Después de decir eso, subié corriendo las escaleras.

Al acostarse, dej6 que su respiracion se hiciera profunda unas cuantas veces, luego se calmé gradualmente.

Mir6 fijamente el techo de su dosel rosa durante un largo rato.

Ella era Alicia, la nila mimada de su familia, nunca habfa sufrido un desplante en sus dieciséis afios de vida y mucho menos habfa cedido ante nadie.

Ahora, por Octavio, estaba experimentando todo eso en poco tiempo.

Habia tolerado su tono de hoy, pensando que realmente habia interrumpido sus estudios, se habia contenido sin buscarlo todo el dia, solo para descubrir al final que él habia estado con Mireia todo el dia, ayudéndola con sus estudios y resolviendo sus problemas.

3/5 00:24 Cuanto mas lo pensaba, mas humillada se sentifa.

Octaacababa de entrar a su habitacién y lanzé su teléfono sobre la cama, pensando en ir al bafio, cuando el ny teléfono sono.

Sin ninguna pausa, con su habitual expresién inexpresiva y fria indiferencia, se dirigié al bafio.

Pero se detuvc justo en la puerta.

Tras un segundo, se gird y regresé a la cama para tomar su teléfono.

‘Tavito, ya llegué a casa.” Octafruncié levemente los labios y volvié a tirar el teléfono en la cama.

Sin embargo, antes de poder alejarse, el teléfono soné dos veces seguidas.

Lo tomé de nuevo.

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Dos mensajes de dos personas distintas.

El mensaje de Alicia estaba debajo del de Mireia.

Directamente abrié el mensaje de Alicia.

“;No tienes nada que decirme? Si no sabes qué decir, al menos cuéntqué hiciste esta tarde.” El fruncié el cefio.

“estas interrogando?” “Entonces dtd,” “No tengo nada que decirte.” Después de esperar mucho tiempo, llegé otro mensaje de Alicia, “Octavio, estoy muy enojada ahora, jeres mi hombre y consolaes lo primero que debes hacer!” Al ver el signo de puntuacidn final, Octapudo imaginar a la chica con la barbilla alzada y las mejillas ligeramente hinchadas, enojada, siempre arrogante, y se le curvaron levemente los labios.

Después de tocar la pantalla unas cuantas veces, lanzo el teléfono sobre la cama.

Por otro lado, Alicia miraba fijamente la pantalla de su movil.

Octarespondidé con un mensaje breve, tres palabras sin signos de puntuacién.

No lo soy.

No soy tu hombre.

Ella respiré hondo, presionando la ira y frustracién en su corazén, pensé una y otra vez, finalmente edit otro mensaje para enviarselo.

Luego esperd, mirando fijamente el teléfono, pero la respuesta fue como si hubiera caido en un abismo, sin respuesta durante mucho tiempo.

Esperar su respuesta fue una eternidad.

Cuando Octasali6 de la ducha y el mensaje, ya habian pasado veinte minutos.

Viendo aquel mensaje, no pudo evitar fruncir el cefio.

“Octavio, jcrees que estaremos juntos dentro de diez afios?” Una pregunta sin sentido.

7 Abrid la ventana de chat para responder, pero sus dedos no se movian.

4/5 09:34 Sus ojos, normalmente impasibles, parecieron oscurecerse atin mas.

¢Juntos dentro de diez afios? Irénico.

Ella si que pensaba a largo plazo.

Alicia presioné su dedo contra la pantalla tactil unas cuantas veces, luego apago la pantalla y colocé el celular en la mesita de noche. Se metié bajo las sabanas y apagd la luz antes de acostarse.

Alicia no tenfa idea de a qué hora se habia quedado dormida la noche anterior. Al dia siguiente, el sonido del despertador la sacé de su suefio. Se quedd desorientada unos segundos, hasta que, casi por instinto, tomé el celular que aun estaba en sus brazos.

Al desbloquear el teléfono, apareci6 el chat con Octavio. Lo observé detenidamente por un largo rato, con ojos llenos de esperanza y nerviosismo que poco a poco fueron perdiendo su brillo.

5/5